La ubicación es excelente, céntrica e ideal para Semana Santa.

No había calefacción ni agua caliente, alegando, justo en el momento en que gran parte de los huéspedes nos quejamos, que no se habían dado cuenta que la caldera estaba apagada. Casualidades... La comida bien pero un poco justa. Aún así, no esta tan mal como podría parecer.

Trato familiar, agradable y acogedor. Además, el hostal está ubicado en un buen punto del pueblo. No pudimos pasar allí todos los días que queríamos en un principio, así que repetiremos.

No había calefacción ni agua caliente, alegando, justo en el momento en que gran parte de los huéspedes nos quejamos, que no se habían dado cuenta que la caldera estaba apagada. Casualidades... La comida bien pero un poco justa. Aún así, no esta tan mal como podría parecer.

Trato muy familiar, te hacen sentir como en casa. Ubicación en el centro del pueblo aunque como pueblo tiene muy poco a destacar. Recomendamos ir a la fuente de la Font Vella, pasado la fábrica y realizar una rutilla que sale por ahí, es muy bonita. Nuestro lavabo estaba reformado recientemente con muy buen gusto, a pesar de que le faltaba un secador y que el grifo de la ducha estaba estropeado y no salia todo el agua por el teléfono y claro, al repartirse tenía poca presión. Ventanas reformadas y con mando a distáncia para abrirse des de la cama.

En general no nos ha gustado. Nuestra habitación y imagino que todas necesita reforma urgente ya que el mobiliario es muy antiguo y deteriorado y la decoración es "cutre" y vieja. Seria necesario pintar y cambiar muebles, con esto la mejora seria muy importante. No nos ha gustado tampoco el desayuno, solo habia opción de embutido y pan o tostada con mantequilla y croissant, a escoger, sin buffet. Un poco pobre para mi gusto teniendo en cuenta los 7€ que costaba. El comedor también necesita una renovación. Los pasillos siempre huelen a comida y es un poco desagradable a ciertas horas, se debería revisar la ventilación. No comimos en el restaurante y no podemos opinar aunque sinceramente no hubiera comido allí si pudiera escoger. En general no quedamos satisfechos con la estáncia, por 80€ esperábamos un poco más. Es importante realizar una renovación en las habitaciones (repito que lavabo y ventanas muy bien, eso sí).

la ubicación y el trato excelente

el olor a humedad horroroso, la cama de muelles incomodísima y las almohadas con olor a humedad , lástima no revisen estas cosas, creo q es básico.

Sobre todo el trato familiar, parece como si te conozcan de toda la vida.

En general no nos ha gustado. Nuestra habitación y imagino que todas necesita reforma urgente ya que el mobiliario es muy antiguo y deteriorado y la decoración es "cutre" y vieja. Seria necesario pintar y cambiar muebles, con esto la mejora seria muy importante. No nos ha gustado tampoco el desayuno, solo habia opción de embutido y pan o tostada con mantequilla y croissant, a escoger, sin buffet. Un poco pobre para mi gusto teniendo en cuenta los 7€ que costaba. El comedor también necesita una renovación. Los pasillos siempre huelen a comida y es un poco desagradable a ciertas horas, se debería revisar la ventilación. No comimos en el restaurante y no podemos opinar aunque sinceramente no hubiera comido allí si pudiera escoger. En general no quedamos satisfechos con la estáncia, por 80€ esperábamos un poco más. Es importante realizar una renovación en las habitaciones (repito que lavabo y ventanas muy bien, eso sí).